Me dejé de hablar cuando me conocí.
Es que no me caí muy bien.
Me propuse mejorar y me lo he currado.
Ahora me paso post-it
con las cosas que no
puedo dejar para mañana.
De muchas me acuerdo ayer;
otras las he olvidado
en el cajón de las cosas urgentes
que me vigila desde la rendija
del armario de asuntos pendientes.
Me instalé en el futuro
vivo en el pasado
y espero el presente
desde la buhardilla
donde no vivo.
Lanzo respuestas a
preguntas huérfanas
pero me deniegan
la idoneidad como
madre adoptiva.
Es que no me caí muy bien.
Me propuse mejorar y me lo he currado.
Ahora me paso post-it
con las cosas que no
puedo dejar para mañana.
De muchas me acuerdo ayer;
otras las he olvidado
en el cajón de las cosas urgentes
que me vigila desde la rendija
del armario de asuntos pendientes.
Me instalé en el futuro
vivo en el pasado
y espero el presente
desde la buhardilla
donde no vivo.
Lanzo respuestas a
preguntas huérfanas
pero me deniegan
la idoneidad como
madre adoptiva.
Construyo paisajes que inician recuerdos y eliminan momentos.
Practico incisiones quirúrgicas para extraer el líquido blanco que supura la infección.
Deconstruyo un cuerpo que no fue para inventar el que imaginé.
Sueño con monstruos en los que se proyectan fragmentos unitarios de mi identidad maldita.
He intentado empezar varías veces, y en honor a la verdad; todas las he terminado.
Me he quedado sin ideas para reinventarme; no sé si sigo siendo o dejé de existir y todavía no me he enterado.
Se aceptan propinas.
Practico incisiones quirúrgicas para extraer el líquido blanco que supura la infección.
Deconstruyo un cuerpo que no fue para inventar el que imaginé.
Sueño con monstruos en los que se proyectan fragmentos unitarios de mi identidad maldita.
He intentado empezar varías veces, y en honor a la verdad; todas las he terminado.
Me he quedado sin ideas para reinventarme; no sé si sigo siendo o dejé de existir y todavía no me he enterado.
Se aceptan propinas.
4 comentarios:
No tengo cambio, lo siento...
De una intensidad extrema este escrito de hoy. Por lo menos para mi...
Hay cosas que tú escribes que me llegan en lo más profundo, me dejan sensible (y eso no es negativo),esa sensibilidad que aflora cuando nos metimos en una introspección de nosotros mismos, espiando todo!,lo bueno y lo malo, y nos encontramos con la confrontación necesaria: Me haré cargo de lo que puedo cambiar? Asumo lo que no? Me quiero tal cual soy? Me he de amar siempre, a pesar que otros no lo hagan?
En fin, reflexiones...
Sabes, los versos centrales me hicieron recordar unos míos, de hace tiempo ya...Te los copio (y te los regalo):
"Guardo un amor imposible
Tengo uno que es imposible
Espero a uno, en un casi imposible"...
Abrazos, Elena!
Hay que ser mamona para poner la foto de mis objetos personales en semejante poema....tu no te has enterao que en el huevo estaba escrito que te traían pa que yo pudiera vivir..o lo que sea.
Beginage
Publicar un comentario