sábado, 13 de agosto de 2011

marea

Santiago Gamero


Cuado la marea sube
se me rompen las piedras en el pecho.
Intento reunir la arena molida

y la seco con mi aliento
y la moldeo con las manos
y la duermo en mis sueños

pero no vivo en mi cuerpo

porque la sangre no se apaga con agua
la sed no se calma con tierra
las palabras no se ahogan con silencio

no se puede matar
lo que está vivo


21 comentarios:

Ignacio dijo...

Siempre consigues emocionarme, y me haces pensar. ¿Es mucho pedirte que me pusieras un correo privado?

pocofre dijo...

Que buenos parrafos, se siente una ternura estupenda al leerlos.

saludos

Tracy dijo...

Las dos estrofas primeras son un poema en sí.

Salomé dijo...

Siempre puedes recurrir al sueño de los inocentes...

alguien dijo...

Me gusta.

Noelia Palma dijo...

no se puede vivir lo que está muerto...

(que hdp soy, perdón)

te quiero Elena!

TORO SALVAJE dijo...

Si que se puede.
Millones de años lo confirman.

Besos.

Pluma Roja dijo...

Lo que está vivo es lo que se mata, lo que esta muerto muerto está.

Besos, Muy bueno como siempre.

Hasta pronto.

Tot Barcelona dijo...

Pués no, no se puede matar lo que está vivo...

N dijo...

Chapó, me quito el sombrero¡¡¡

Calleja de la Hoguera dijo...

¿De verdad que no?
¿Que no?
¿Estás segura de que no?

Yo sé de quien ahora tan sólo es esencia. Un recuerdo en mí.

Un beso.

Emily dijo...

"porque la sangre no se apaga con agua"

y toda la fuerza.

besos, elena.

Charcos dijo...

así es las palabras se vuelven majestuosas y verdugos de nuestros sueños cuando el silencio se hace eco.

besicosss

la chica de las biscotelas dijo...

las mareas...

soy... dijo...

Yo estoy vivo.

Y tus letras me matan...

Gracias.

David Cotos dijo...

muy cierto.

Ardaire dijo...

Es muy lindo :)

El Poeta Maldito dijo...

Me confundió un poco la idea, al principio no compartía, ahora me permito dudar porque puede que no lo haya agarrado.

El Poeta Maldito dijo...

Me confundió un poco la idea, al principio no compartía, ahora me permito dudar porque puede que no lo haya agarrado.

Leo Mercado dijo...

Yo tampoco vivo en mi cuerpo, razón por la cual, intercepto la agudeza.
Besos.

anuar bolaños dijo...

Mis ojos dan cuenta
del socavón sembrado dentro,
no tienen brillo,
un otoño lastimado los domina.
Mis ojos son una cavidad sin fondo
idénticos al corazón por dentro,
recinto sitiado sin dueño ni huésped.