domingo, 11 de diciembre de 2011

melocotón


pluja fina  

 
en esta inconsciencia donde flotan
los corchos que quedan indemnes de mi cordura,
las tempestades yoicas soplan un viento
de desastres inminentes
por la ruptura de un dique seco
(el de mi deseo)

el faro que seguí
tenía un espejo fragmentado
en colores átonos
pero pude barrerlos y guardar
uno a uno
mis rostros gastados

la cadena del ancla oxidada
nace en mi lengua
y las palabras sólo salen en forma de letra
dibujadas por un dedo cortado 
con el hueso de melocotón 
que robé al último niño que me habitó

quizás no quería
quizás sólo lo deseaba 


11 comentarios:

Tot Barcelona dijo...

quizás deseabas lo que querías ¡¡¡

Anónimo dijo...

Brava Hermana Sabvia.

DANI dijo...

JUas!!! me he quedado sin aliento al leete...que maavilla.

Besazos enormes

ladytacones dijo...

Auryn, te deseo que ningún niño de los que te habite sea el último!

;)

Maritza dijo...

Abrazos, Elena hermosa.

alfonso dijo...


· escribes bien, tanto, que ni sé que decir...

· Saludos

CR & LMA
________________________________
·

Noelia Palma dijo...

quizás el desastre era ése niño
o todos los niños que te habitaron
pero los que te habitarán
no se van a oxidar, Elena, siempre van a salir en forma de letra, pero van a salir

te abrazo, siempre

David Cotos dijo...

reflexivo poema.

Darío dijo...

usted es una tempestad un tornado un trueno sin rayo.

JuanRa Diablo dijo...

Todo lo bello de Elena (más el vello de la piel del melocotón)

Carmen dijo...

"Y las palabras sólo salen en forma de letras".
Siento decirte que a pesar de que haces una afirmación
muy clara, las palabras han salido de tu poema en forma de deseos, de dudas, de colores y de , de siluetas infantiles, " de un dique seco".
¡Ánimo!.
Un saludo y ¡Feliz Navidad!